Nebver San Martín Herrera es un artista plástico peruano de 71 años que ha desarrollado su actividad creativa a través del humor gráfico, la pintura, maqueteador y un escritor que se ha sumado con entusiasmo a nuestra búsqueda de lo que los caricaturistas de todo el mundo piensan sobre el envejecimiento. Así, sigue las respuestas de este magnífico artista:
«Primero, todos estamos sometidos a esas tres paralelas que rigen y someten inexorablemente nuestras vidas: el espacio, la energía y el tiempo.
Segundo, si bien es cierto que ese trípode es inevitable como menester, no menos cierto es que es más o menos general pero también particular. Es decir, el avance o deterioro dependen del azar o las circunstancias, por un lado, como también del dominio o control personales.
Tercero, los relevos generacionales son legítimos y necesarios pues hacen posible la variedad y continuidad de las ruedas de la vida en los múltiples aspectos.
Cuarto, por lo mismo, es legítimo ese cambio de postas como la constancia y creatividad, pese a la edad avanzada. Los ejemplos sobran para dar testimonio de esta aseveración.
Y, por último, quinto, es también una verdad vergonzosa, utilizar como pretexto al protagonismo de las nuevas generaciones, para exonerar nuestras precariedades, limitaciones, cansancio o falta de emprendimiento o innovaciones.»
¿El caricaturista también envejece?
Nebver - «Como toda materia, sí. Algunas veces se adelanta el proceso natural por motivos ajenos o circunstancias inmanejables.»
¿Pese al avance de los años (vejez), la evidencia del deterioro biológico del cuerpo; es decir, las manos tiemblan, los ojos fallan; es posible que el humor persista? ¿Es factible revertir ese natural desgaste?
Nebver - «Acaso, con los primeros achaques de la vejez, uno es asaltado por una cruda realidad inobjetable: todo cuanto comienza, acaba. A partir de los 70 años, nos golpea inmisericordemente esa verdad. En unos se acelera más que en otros.
Sin embargo, se puede revertir.
Primero, no tirar la toalla.
Segundo, seguir insistiendo en ese ardor humorístico, pese a la carencia de publicar a través de los medios de prensa. Haciendo público nuestro trabajo en las redes sociales.
Cuarto, actualizarse con el uso los recursos tecnológicos (donde la tableta digital es una generosa concubina) Todos los medios posibles de las redes sociales.
Quinto, seguir creando hasta cuanto nos permitan el apoyo cerebral, las manos y la vista.
Sexto, disfrutar también el trabajo de los colegas paisanos y extranjeros.
Séptimo, Empezar a dar más seguido las clases maestras.
Y, finalmente, octavo, publicar libros de nuestro trabajo antológico.»
¿El envejecimiento también daña la visión filosófica del humor, haciéndolo más avinagrado?
Nebver - «Pueda que en algunos casos suceda eso. Dicen que el pesimista no es más que un optimista cansado. De donde se colige que el humorista gráfico, sobre todo el contestatario o político, ha sido testigo durante tantos años, que los poderes y el sistema no solo persisten en su tóxica terquedad, sino que hasta han perdido los pocos escrúpulos. Esta nociva reiteración aviva la ironía o revela la rabia en la viñeta respondona.
Sin embargo, debo admitir (como en todo), hay niveles, jerarquías, en el trabajo humorístico; llegando, en algunos casos, a resultados pobrísimos, carentes de calidad irónica para caer en el sarcasmo más agresivo.»
¿La mirada se vuelve más satírica o irónica?
Nebver - «Personalmente, pese a estar sobre los 70 años y, lo que es peor, ser testigo golpeado de los turnos de Gobierno, mugrientos y delincuentes, adosados al súper sistema mundial, soy un testarudo artista gráfico de responder a todas estas canalladas, afilando mi constante ironía.
Creo, en algunos casos, algunos humoristas, por lo mencionado más antes, recurren al sarcasmo o al golpe elemental primitivo.»
¿Hay diferencias en su humor cuando comenzó y ahora después del tiempo transcurrido? ¿Cuáles son?
Nebver - «Claro que hay diferencias. Hablo de los más. No se siente ni piensa igual de un extremo a otro.
Primero, por la fuerza poderosa de la evolución (cuerpo, mente y asimilación de circunstancias).
Segundo, la historia (experiencias de todo tipo) recorrida.
Tercero, el peso específico de la madurez, como resultado de la báscula existencial.
Cuarto, más el crecimiento gráfico y la creatividad, hacen posible mejores resultados.»
Todos creen que un humorista es una persona alegre, divertida, ¿eso es un mito? ¿O es un avinagrado viejo dispensador de sonrisas cómplices?
Nebver - «Creo que es un rotundo mito como un misterio sicológico. No conozco colegas de perfil avinagrado. En cambio, muchos sí son serios y otros gastan un talante alegre y hasta socarrón.
Aunque la vejez nos hace, a casi todos (no solo humoristas), más impacientes y con cierta dosis de irritabilidad.»
¿Qué es más difícil de aceptar a medida que envejeces?
Nebver - «No tengo dudas que el deterioro físico. Empieza a fallar el pulso y un poco la vista. Y esa evidencia, contundente, va minando el ánimo.»
¿Se sientes envejecido? ¿Qué es para Ud. la vejez?
Nebver - «Racionalmente, dada la realidad palmaria (deterioro físico), entiendo que ya estoy viejo. Pero mentalmente, mi proceso es más lento. Esto aviva mi esfuerzo humorístico y artístico. Aunque con menos pujanza que antes.
Para mí (y creo que para la gran mayoría), la vejez es casi un sinónimo de ancianidad. Pese a la gran acumulación de años, también se contrapone la experiencia, el mejor desarrollo gráfico y la sabiduría; las cuales repercuten en resultados de mayor jerarquía.
Sin embargo, es oportuno denunciar el maltrato que al respecto arroja el mercado. Según sus reglas, un artista gráfico solo sirve hasta los 50 años, por lo que se contenta con una generación de relevo que, en la mayoría de los casos, apenas llega a la mediocridad, ofreciendo precios irrisorios por su trabajo, lo que fortalece su mejor aceptación y el consiguiente despido de los “viejos”.»
¿Es más fácil mirar la vejez ajena que su propia decadencia?
Nebver - «Tengo la suerte de ser testigo de colegas mucho mayores y que siguen publicado en las redes; otros que han fallecido trabajando pese a su avanzada edad. Eso ha sido una cuña rara, pero de un poderoso acicate para continuar e imitar.
Al margen, me ayuda muchísimo mi avance intelectual y mi talante travieso, mi espíritu de prójimo que se agita tras el bien común y contra todo tipo de abuso, con una dosis de ají picante y un desparpajo sagrado para vivir la vida más allá del decoro.
Claro, sigo publicando en las redes. También escribo.»
¿Cómo fue la adaptación a las nuevas tecnologías? ¿Sigue prefiriendo las técnicas básicas?
Nebver - «Fui, lo confieso, un remolón en aceptar el avance ineludible de la tecnología. Amaba (como ahora), el placer de bocetar, pasar tinta y pintar, viendo y oliendo ese maravilloso proceso. Hasta que un buen amigo me llama un día diciéndome que me ha comprado una tableta digital Wacon y que le pagaría en cinco meses. Fue un disparo generoso y a quemarropa. Hoy le agradezco enormemente, pues “exonera” mi temblor de manos que se acentuó tremendamente por el ACV que sufrí el año pasado.
Hace 8 años, aproximadamente, que me he visto obligado a trabajar digitalmente. Esta técnica tiene múltiples ventajas. Casi ya no uso lápiz. Me costó muchísimo adaptarme, pero fui creciendo cada vez más. Ahora casi todo lo hago con la tableta.
Pese a sus innegables ventajas (pues jamás se deteriora el arte, puede multiplicarse o clonarse, borrarse y modificarse cuantas veces se requiera), añoro siempre volver a lo clásico, pues tiene otro sabor. La tentación es cada vez más frecuente.»
¿Cómo ves esta evolución, principalmente en la actividad del dibujante o humorista gráfico? ¿Qué más ha cambiado?
Nebver - «Según la dialéctica, lo único permanente es el constante cambio. De modo que aun no gustando es médula de la evolución.
Pese a esta cruda verdad, debo decir que las nuevas generaciones no se preocupan mucho por el principio básico del buen dibujo y menos por la manía de una buena creación, pues el mercado de los medios periodísticos se ha retraído y conformado con lo simple, básico, mediocre.
A esto debo adicionar que el arte moderno ha potenciado cualquier cosa o disparate, so pretexto de ser arte incuestionablemente.
Quienes ya estamos hasta el cuello en las aguas turbulentas del Siglo XXI, nos vemos sacudidos por el avance acelerado de la tecnología, la ciencia, la información, las relaciones humanas, la economía, el mercado, las políticas y, por añadidura, el arte.
Entonces, si no solo no nos adaptamos al ritmo de los tiempos y, aceptando tremendos desafíos, no dejamos de impregnar nuestra huella contestataria, habremos fracasado.»
¿Hay tanta o más libertad creativa que antes? ¿Hay censura cuando se publica humor en los medios periodísticos?
Nebver - «Muy rarísima vez he tenido problemas de ese tipo cuando trabajaba en medios de prensa y, sobre todo al hacer humor político. Sin duda, ha sido una suerte fabulosa, pues es inevitable la censura (en algunos casos más que en otros), dado que el dueño del medio que nos contrata y, por el cual nos paga, como vive (vivimos) del avisaje que se publica en su diario periodístico, no nos permite atentar abiertamente contra quienes sostienen dicha empresa. Es, sin duda, el gran desafío de los humoristas y del dueño de prensa, para manejar el poder contestatario del humor gráfico que permite el diario, sin que atente frontalmente contra el poder publicitario (como brazo del sistema) que hace posible con la publicación de su aviso comercial, funcione toda la maquinaria.
De allí nuestro trabajo que, pese a esa constante difícil, se haga meritoria, como la muñeca y el talante del empleador por permitirnos sobresalir a ambos.»
¿Cómo ve la sociedad en la que viven a las personas mayores?
Nebver - «Definitivamente el mundo ha cambiado a una velocidad inimaginable, creo que en desmedro de la calidad de vida en casi todos los aspectos. Dado el vértigo del consumo y el mercado, los valores éticos, más la creciente explosión demográfica y el acelerado zig-zag de la oferta y la demanda, los trabajadores (en general) que rebasan los 50 años de edad ya son marcados como “viejos”. Esta burrada palmaria que atiza el sistema, ha disparado la edad humana servible hasta un poquito más, para luego hacerla desechable. En el mejor de los casos, tras cumplidos los 65 años. A partir de esa edad, la pendiente es penosa y denigrante. Salvo rarísimas excepciones.
En mi país, existen solo 2 casos. El de dos colegas, acaso los más célebres, que aún trabajan en medios de prensa escrita, ambos rebasan los 70 años de edad. El mérito es propio y, claro, el de los medios.
De otro lado, somos 3 humoristas más los que bordeamos los 70 años. Todos publicamos solo en las redes. El que tiene mayor actividad y mayores trabajos recientes, es el que escribe.»
Al mirar al pasado, ¿es importante mantener vivos los momentos más humorísticos, relegando las tragedias o la amargura al olvido o tienen más fuerza y son capaces de destruir esos trances más alegres?
Nebver - «Los que hacemos humor social o, mejor aún, político, lo realizamos en un contexto histórico y, para nosotros, ya cumplió su cometido. Dado que nuestro trabajo en medios tiene una naturaleza de denuncia y respuesta irónica a las injusticias del Gobierno y del sistema establecido. Quiero decir que esa especie de “venganza gráfica” tuvo su momento cumbre en el tiempo en que se hizo público para beneficio de los lectores como nuestros y del diario, como la martillada incomodidad de los amos de las trastadas.
Si los recordamos, es para festejar a la distancia, nuestra pequeña guerra contestataria, más no para compensar algún tipo de contrariedad actual; sino más bien para certificar que los enemigos del bien común están peor que antes y, de otro lado, el de garantizar el honrado bienestar de nuestro sueño.»
¿Qué es para Ud. el humor y cuál es su importancia en la sociedad?
Nebver - «El humor gráfico es como todo arte, muy basto. Hay humor blanco, infantil, erótico, negro, chancho, filosófico, social, religioso, sicológico, político, educativo, supra realista, romántico, histórico, de salud, animal, ecológico, absurdo, etc.
Por lo mismo, su enorme importancia en la cultura. Hacerlo es importante; y bien, aún mayor. Puesto que la feliz sentencia de que una imagen vale más que mil palabras, puedo aseverar sin retaceos, que el sello histórico de este gigantesco poder está plagado en nuestra evolución humana, desde los petroglifos y testimonios gráficos tribales de aquel inicio hasta la abundante muestra de los incontables humoristas gráficos que han marcado con grandeza nuestra tantas veces inverosímil historia.
En tal sentido puedo agregar que el humor gráfico es imprescindible en nuestra vida. No solo por ser necesario, sino, sobre todo, un imperativo. Ya que de ese modo no solo han servido y sirven para alegrarnos el trajín diario, sino también para despertarnos e indignarnos frente a las barbaridades de todo poder, bajo la envoltura de un “festejo” punitivo. Los ejemplos son hartísimos al respecto y en todo el planeta.»
¿Es la demencia senil una variante del humor absurdo?
Nebver - «Desde lo absurdo, puede que sí. Total, la vida está plagada de esas cosas semejantes, ¿no? Definitivamente, es mejor reír para no agestarse y, menos, llorar; pese a tantas evidencias en contra. Una de ellas es la demencia senil, que, solo la familia que la padece y sostiene, tiene el mayor derecho de opinar al respecto. Pero debo remarcar, que es una enfermedad que, paralelamente al deterioro propio, la atenúa con esos aderezos de repentina alegría, motivados por los disloques de tiempo, espacio y personas, que provoca la enfermedad.»
¿Cree que el humor puede ayudar a las personas a llevar mejor el envejecimiento y contribuir al optimismo cotidiano el decaimiento físico?
Nebver - «Contundentemente que sí. Sobran las explicaciones y los incontables ejemplos.»
¿Puede el deterioro mental ser contrarrestado por la creatividad humorística? Es decir, si son 12 los chistes, e ya vienen en la Biblia, e el resto son variaciones ¿hay una tendencia con la edad a recuperar viejas ideas, tratando de hacer nuevas variaciones, tratando de mejorarlas? ¿Es importante reciclar en el humor?
Nebver - «Como una recomendación, es imprescindible no dejar de crear hasta que el cerebro lo permita. Creo que a partir de los 60 años se debe acentuar esa actividad. Empeño que va a ayudar en mucho al desarrollo del trabajo humorístico.
Dicen además los especialistas, que a partir de los 50 años se debe moderar la dieta alimentaria, incentivar los ejercicios físicos y llevar el ritmo cotidiano con un talante más distendido y alegre, para llegar con mejores posibilidades a la tercera edad. Lo que se viene llamando una mayor calidad de vida.
De modo que, respecto a la pregunta inicial, la respuesta es rotundamente que sí. Y que, si se puede reciclar el humor, se puede; pero es muy aislado.»
¿Qué es más fácil, o más difícil, que una persona mayor mire el futuro con humor?
Nebver - «Claro que es más difícil. Dado el deterioro y el cansancio palmarios por los años. Es decir, no es imposible, mejor todavía, es menester; pero no supone su facilidad.»
¿Le asusta la muerte o es morirse de risa la mejor manera de cerrar este ciclo? ¿Está preocupado por el futuro de su trabajo después que se haya ido?
Nebver - «Creo que morirse de risa, textualmente, debe de ser la mejor variante de cerrar la puerta de la vida. Le temo más a esos apagones remolones y muy dolorosos. No los quiero. Ojalá me sea favorable la tranquilidad de un golpe repentino y letal.
Lo que sí me preocupa (espero no sea así), es que la cantidad de archivos de mi basto trabajo se queden adosados al vacío y se cubran de una gruesa costra de olvido. Así mismo me preocupa y mucho, tener una ancianidad que no me sea favorable; sobre todo si me convierto en una carga insoportable.»
Aging with Humor – Nebver (71 years old) - Perú
Nebver San Martín Herrera is a 71-year-old Peruvian plastic artist who has developed his creative activity through graphic humor, painting, a model artist, and a writer who has enthusiastically joined our search for what cartoonists around the world think. about aging. So, follow the responses of this magnificent artist:
«First, we are all subjected to those three parallels that govern and inexorably submit our lives: space, energy and time.
Second, while it is true that this tripod is inevitable as necessary, it is no less true that it is more or less general but also particular. That is to say, the advance or deterioration depend on chance or circumstances, on the one hand, as well as personal domain or control.
Third, the generational changes are legitimate and necessary since they make possible the variety and continuity of the wheels of life in multiple aspects.
Fourth, for the same reason, this change of posts is legitimate, such as perseverance and creativity, despite advanced age. There are plenty of examples to bear witness to this assertion.
And finally, fifth, it is also a shameful truth to use the role of the new generations as a pretext, to exonerate our precariousness, limitations, fatigue or lack of entrepreneurship or innovations.»
Does the cartoonist also age?
Nebver - «Like all matter, yes. Sometimes the natural process is brought forward for reasons beyond our control or unmanageable circumstances.»
Despite the advancement of the years (old age), the evidence of the biological deterioration of the body; that is, the hands tremble, the eyes fail; Is it possible that humor persists? Is it feasible to reverse that natural wear and tear?
Nebver - «Perhaps, with the first ailments of old age, one is assaulted by a harsh, unquestionable reality: everything that begins, ends. From the age of 70, that truth hits us mercilessly. In some it accelerates more than in others.
However, it can be reversed.
First, don't throw in the towel.
Second, to continue insisting on that humorous ardor, despite the lack of publishing through the media. Making our work public on social networks.
Fourth, be updated with the use of technological resources (where the digital tablet is a generous concubine) All possible means of social networks.
Fifth, continue creating as long as the brain support, hands and sight allow us.
Sixth, also enjoy the work of fellow countrymen and foreigners.
Seventh, Start giving master classes more often.
And finally, eighth, publish books of our anthological work.»
Does aging also damage the philosophical view of humor, making it more sour?
Nebver - «That may happen in some cases. They say that the pessimist is nothing more than a tired optimist. From where it can be inferred that the cartoonist, especially the rebellious or political one, has been a witness for so many years, that the powers and the system not only persist in their toxic stubbornness, but have even lost their few scruples. This noxious reiteration fuels the irony or reveals the rage in the responsive cartoon.
However, I must admit (as in everything), there are levels, hierarchies, in humorous work; Arriving, in some cases, to very poor results, lacking in ironic quality to fall into the most aggressive sarcasm.»
Does the look become more satirical or ironic?
Nebver - «Personally, despite being over 70 years old and, what is worse, witnessing the battered, filthy and delinquent turns of government, attached to the world super system, I am a stubborn graphic artist to respond to all these scoundrels, sharpening my constant irony.
I think, in some cases, some comedians, because of the above mentioned, resort to sarcasm or primitive elemental punch.»
Are there differences in your mood when you started and now after the time has elapsed? Which are?
Nebver - «Of course there are differences. I speak of the most. You don't feel or think the same from one end to the other.
First, by the powerful force of evolution (body, mind and assimilation of circumstances).
Second, the history (experiences of all kinds) covered.
Third, the specific weight of maturity, as a result of the existential scale.
Fourth, more graphic growth and creativity make better results possible."
Everyone believes that a comedian is a happy, funny person, is that a myth? Or is he a sour old dispenser of knowing smiles?
Nebver - «I think it is a resounding myth like a psychological mystery. I don't know colleagues with a sour profile. On the other hand, many are serious and others have a cheerful and even sarcastic mood.
Although old age makes us, almost all of us (not only humorists), more impatient and with a certain dose of irritability.»
What is harder to accept as you get older?
Nebver - «I have no doubts that the physical deterioration. The pulse begins to fail and a little sight. And that evidence, forceful, is undermining the spirit.»
Do you feel old? What is old age for you?
Nebver - «Rationally, given the apparent reality (physical deterioration), I understand that I am already old. But mentally, my process is slower. This fuels my humorous and artistic effort. Although with less force than before.
For me (and I think for the vast majority), old age is almost a synonym for old age. Despite the great accumulation of years, experience, the best graphic development and wisdom are also opposed; which have repercussions on results of a higher hierarchy.
However, it is opportune to denounce the mistreatment that the market throws in this regard. According to their rules, a graphic artist only serves until they are 50 years old, so they are content with a generation of relief that, in most cases, barely reaches mediocrity, offering ridiculous prices for their work, which strengthens their better acceptance and the consequent dismissal of the “old”.»
Is it easier to look at the old age of others than your own decadence?
Nebver - «I am lucky to witness colleagues who are much older and who continue to publish on the networks; others who have died working despite their advanced age. This has been a rare wedge, but a powerful incentive to continue and imitate.
On the sidelines, my intellectual advancement and my mischievous nature help me a lot, my neighborly spirit that stirs after the common good and against all kinds of abuse, with a dose of chili pepper and a sacred self-confidence to live life beyond decorum. .
Sure, I keep posting on the networks. I also write."
How was the adaptation to new technologies? Do you still prefer the basic techniques?
Nebver - «I confess I was lazy in accepting the inescapable advance of technology. He loved (as he does now) the pleasure of sketching, inking and painting, seeing and smelling that marvelous process. Until a good friend calls me one day saying that he bought me a Wacon digital tablet and that I would pay him back in five months. It was a generous and point-blank shot. Today I thank you enormously, because it "exonerates" my hand tremor that was tremendously accentuated by the ACV I suffered last year.
It has been approximately 8 years since I have been forced to work digitally. This technique has multiple advantages. I hardly use a pencil anymore. It took me a lot to adapt, but I grew more and more. Now almost everything I do with the tablet.
Despite its undeniable advantages (because art never deteriorates, it can be multiplied or cloned, deleted and modified as many times as required), I always yearn to return to the classic, because it has another flavor. Temptation is more and more frequent."
How do you see this evolution, mainly in the activity of the cartoonist or graphic humorist? What else has changed?
Nebver - «According to dialectic, the only permanent thing is constant change. So even not liking it is the core of evolution.
Despite this harsh truth, I must say that the new generations do not care much about the basic principle of good drawing and less about the hobby of a good creation, since the journalistic media market has withdrawn and conformed to the simple, basic , mediocre.
To this I must add that modern art has promoted anything or anything nonsense, under the pretext of unquestionably being art.
Those of us who are already up to our necks in the troubled waters of the 21st century are shaken by the accelerated advancement of technology, science, information, human relations, the economy, the market, politics and, in addition, art. .
So, if we don't just keep up with the times and, accepting tremendous challenges, we don't stop permeating our protestatory imprint, we will have failed.»
Is there as much or more creative freedom than before? Is there censorship when humor is published in the media?
Nebver - «Very rarely have I had problems of this type when I worked in the media and, above all when doing political humor. Undoubtedly, it has been fabulous luck, since censorship is inevitable (in some cases more than in others), since the owner of the medium that hires us and, for which he pays us, lives (we live) from the advertising that is publishes in his journalistic journal, does not allow us to openly attack those who support said company. It is, without a doubt, the great challenge for humorists and the owner of the press, to manage the rebellious power of graphic humor that the newspaper allows, without it directly attacking the advertising power (as an arm of the system) that makes the publication possible. of your commercial notice, all the machinery works.
Hence our work that, despite this difficult constant, becomes meritorious, like the doll and the spirit of the employer for allowing us both to excel."
How do you see the society in which they live older people?
Nebver - «The world has definitely changed at an unimaginable speed, I think to the detriment of the quality of life in almost all aspects. Given the vertigo of consumption and the market, ethical values, plus the growing demographic explosion and the accelerated zig-zag of supply and demand, workers (in general) who are over 50 years of age are already marked as "old ”. This blatant nonsense that fuels the system has shot up the usable human age a little more, to later make it disposable. In the best of cases, after reaching the age of 65. From that age, the slope is painful and denigrating. With very rare exceptions.
In my country, there are only 2 cases. That of two colleagues, perhaps the most famous, who still work in print media, both exceed 70 years of age. The merit is their own and, of course, that of the media.
On the other hand, we are 3 more comedians who are close to 70 years old. We all publish only on the networks. The one with the greatest activity and most recent works is the one who writes.»
When looking at the past, is it important to keep the most humorous moments alive, relegating tragedies or bitterness to oblivion, or are they stronger and capable of destroying those happier moments?
Nebver - «Those of us who do social or, better yet, political humor, do it in a historical context and, for us, it has already fulfilled its mission. Given that our work in the media has a nature of denunciation and ironic response to the injustices of the Government and the established system. I want to say that this kind of "graphic revenge" had its peak at the time it was made public for the benefit of readers like ours and the newspaper, like the hammered discomfort of the masters of pranks.
If we remember them, it is to celebrate from a distance, our little rebellious war, but not to compensate for some type of current setback; but rather to certify that the enemies of the common good are worse than before and, on the other hand, to guarantee the honest well-being of our dream.»
What is humor for you and what is its importance in society?
Nebver - «Graphic humor is like all art, very coarse. There is white, childish, erotic, black, pig, philosophical, social, religious, psychological, political, educational, supra-realistic, romantic, historical, health, animal, ecological, absurd humor, etc.
For the same reason, its enormous importance in culture. Doing so is important; and well, even bigger. Since the happy sentence that an image is worth a thousand words, I can assert without hesitation, that the historical seal of this gigantic power is plagued in our human evolution, from the petroglyphs and tribal graphic testimonies of that beginning to the abundant sample of the countless graphic humorists who have marked our so often implausible history with greatness.
In this sense I can add that graphic humor is essential in our lives. Not only because it is necessary, but, above all, an imperative. Since in this way they have not only served and serve to brighten up our daily grind, but also to wake us up and indignate us in the face of the atrocities of all power, under the guise of a punitive "festival". The examples are very fed up in this regard and all over the planet.”
Is senile dementia a variant of absurd humor?
Nebver - «From the absurd, maybe yes. Total, life is full of those similar things, right? Definitely, it is better to laugh so as not to get excited and, less, to cry; despite so much evidence to the contrary. One of them is senile dementia, which, only the family that suffers from it and supports it, has the greatest right to have an opinion about it. But I must emphasize that it is a disease that, parallel to its own deterioration, attenuates it with those seasonings of sudden joy, motivated by the dislocations of time, space and people, caused by the disease.»
Do you think that humor can help people better cope with aging and contribute to daily optimism with physical decline?
Nebver - «Absolutely yes. There are plenty of explanations and countless examples.”
Can mental deterioration be counteracted by humorous creativity? That is, if there are 12 jokes, and they already appear in the Bible, and the rest are variations, is there a tendency with age to recover old ideas, trying to make new variations, trying to improve them? Is it important to recycle in humor?
Nebver - «As a recommendation, it is essential not to stop creating until the brain allows it. I believe that from the age of 60 this activity should be accentuated. A commitment that will greatly help the development of humorous work.
The specialists also say that from the age of 50 the diet should be moderated, physical exercise encouraged and the daily rhythm carried out with a more relaxed and cheerful mood, in order to reach the elderly with better possibilities. What has been called a higher quality of life.
So, regarding the initial question, the answer is emphatically yes. And that if humor can be recycled, it can; but it is very isolated.”
What is easier, or more difficult, for an older person to look at the future with humor?
Nebver - «Of course it is more difficult. Given the deterioration and fatigue over the years. That is to say, it is not impossible, better still, it is necessary; but it does not suppose its ease.»
Are you scared of death or is dying of laughter the best way to close this cycle? Are you worried about the future of your job after you're gone?
Nebver - «I think that dying of laughter, literally, must be the best variant of closing the door of life. I am more afraid of those lazy and very painful blackouts. I do not want them. Hopefully the tranquility of a sudden and lethal blow will be favorable to me.
What does worry me (I hope this is not the case) is that the number of files of my coarse work remain attached to the void and become covered with a thick crust of oblivion. Likewise, I am very concerned about having an old age that is not favorable to me; especially if I become an unbearable burden."