Humor y demencia

Los experimentos psicolingüísticos recientes han hecho patente que la afectación del lenguaje en demencia se extiende al ámbito de la pragmática y, particularmente, al humor.

Se trata, sobre todo, de trastornos en la capacidad de las personas con demencia de descodificar adecuadamente la simbología lingüística de base social y emocional.

Estos trastornos se manifiestan en una marcada dificultad para entender estímulos humorísticos, la tendencia a imitar las estrategias humorísticas propias de la infancia y el desajuste entre la producción del humor y el contexto. En las vertientes perceptiva y productiva del humor, las personas con demencia pueden presentar una afectación variable entre enfermedades, debido tanto al deterioro de su competencia pragmática y de otros niveles lingüísticos, como a la afectación de las funciones cognitivas generales. 

Todo esto lo afirman los responsable del estudio: Olga Ivanova, Universidad de Salamanca; María Fernández del Viso, Consejería de Educación. Gobierno de Cantabria y Juan José García Meilán, Universidad de Salamanca.